Resulta que alguien bautizó, bajo el nombre de “tocino” a todos esos correos publicitarios que tú aceptaste recibir pero la verdad no lees. Ya sean los múltiples newsletters de sitios que visitas o las promociones de marcas a las que les diste tu dirección de correo, ese es el nuevo tipo de spam llenando nuestros inbox. Mientras que algunos ganan dinero con este tipo de publicidad, el resultado final es una saturación inútil de la red. Si no lo vas a leer, no lo pidas. Si ya lo tienes pero no lo quieres, tómate un minuto para acabar con tu suscripción.
Fuente.- http://www.spk.la
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