Cada año que pasa, las pantallas de nuestros teléfonos móviles y de
nuestras tabletas son más grandes, más luminosas y poseen mejor
resolución, pero aunque mejoren ostensiblemente, siguen teniendo un
mismo problema: se ensucian en segundos.
No
es porque sus dueños sean poco higiénicos, sino porque nuestros dedos
siempre dejan su rastro sobre cualquier superficie: las huellas
dactilares. Para que estas no se vean en exceso sobre nuestro móvil, los
fabricantes de pantallas táctiles tratan el vidrio del que están hechas
de una forma especial, y así consiguen que sea oleofóbico. Se trata de
un proceso por que se dota a la pantalla de una capa de polímeros que
rechazan ciertos materiales como las partículas aceitosas con las que
impregnamos el teléfono cada vez que la manipulamos con los dedos, o nos
la acercamos a la cara para hablar.
No obstante esta propiedad
antisuciedad se termina acabando y con el paso de los meses la pantalla
comienza a asemejarse al parabrisas de un coche del París-Dakar. Sin
embargo, gracias a un descubrimiento de unos investigadores alemanes, en
unos años nuestros aparatitos siempre estarán limpios de huellas.
Para ello, el grupo de investigación del
Instituto Planck
ha combinado el hollín de una vela y sílice a 600 grados centígrados,
añadiendo a la mezcla una capa de silice parcialmente fluorada. El
material resultante es un recubrimiento totalmente transparente que es
capaz de hacer que las partículas de aceite resbalen o reboten de
cualquier material, sea cual sea su naturaleza.
Cómo limpiar una pantalla táctil
El invento tardará unos años en llegar a los aparatos que se vendan en
las tiendas, pero al menos ya sabemos que es un problema que tiene los
días contados. Hasta entonces, solo podemos seguir limpiando las
pantallas táctiles de nuestros gadgets para que mantengan un aspecto
parecido al día que los estrenamos. Para ello, podemos seguir esta serie
de recomendaciones:
- Utiliza únicamente un paño suave y que no desprenda pelusa. Nada de servilletas, ni toallas ásperas.
- Mientras dure el limpiado, el aparato debe estar completamente apagado y no conectado a una fuente de alimentación
-
Humedece ligeramente el paño y pásalo suavemente por la superficie del
aparato, teniendo cuidado, eso sí, de no tocar ninguna abertura, como
el lugar donde se introducen los auriculares o un puerto USB.
- Nunca utilizar ni limpiacristales ni productos para la limpieza del hogar.
Fuente: http://es.finance.yahoo.com/noticias/